Las instalaciones del Seminario Evangélico de Puerto Rico: una cronología de su primer medio siglo por Helen Santiago (mayo/2025) Los misioneros protestantes que llegaron a Puerto Rico a partir de la ocupación de la Isla por los Estados Unidos en 1898, tuvieron, por lo general, una educación sólida. Una parte importante de ellos eran graduados de los más prestigiosos seminarios. Al materializarse en 1919 el gran proyecto de fusión de los diferentes institutos bíblicos de las misiones en una sola entidad –el Seminario Evangélico de Puerto Rico– no fueron escatimados esfuerzos y costos en la búsqueda de una elevada meta: reproducir en Puerto Rico un nivel educativo comparable al del cual procedían. Durante los primeros años fue un verdadero reto preparar candidatos al ministerio con poca educación formal. El objetivo de una educación comparable a la continental tomaría tiempo lograrlo, pero nunca fue abandonado. Parte vital de esos esfuerzos fueron las instalaciones que serían el campus del Seminario. De 1919 a 1935 el Seminario alquiló un impresionante edificio de su tiempo, que hasta entonces había albergado al Instituto Grace Conaway de la Iglesia Bautista. Ese edificio frente a la Universidad de Puerto Rico fue inaugurado en 1914. Estar frente a la institución de educación superior no fue casualidad. La ubicación misma de la Universidad se debió al misionero fundador de la Iglesia Bautista, Hugh P. McCormick, quien convenció de la misma al gobernador y a su gabinete. En no mucho tiempo, se requeriría de los seminaristas que hicieran estudios universitarios previos a su ingreso en el Seminario o simultáneamente. En 1924 la misión bautista adquirió un terreno a corta distancia, en la misma calle. Por detrás corría el tranvía desde el Viejo San Juan a Río Piedras. Por el frente estaba la vía principal de transportación. La propiedad incluía una casa que, por su diseño y magnitud, era llamada casona, según la costumbre de la época. Le daba la espalda a la calle Glorieta, hoy, Mariana Bracetti. Fue comprada con el propósito explícito de que se convirtiera en la sede del Seminario. La casona había sido construida a principios de siglo por la Iglesia Episcopal, para uso de su obispo y para sus oficinas centrales. Estaba ubicada donde luego fue construido el edificio administrativo y académico en 1957. Aaron Webber escribió en sus memorias que, al llegar a Puerto Rico en 1931, residió en ella. Describió que sus puertas dobles abrían desde el balcón a una sala, a una pequeña capilla y a dos de los cuatro cuartos. Desde 1924 y hasta 1935 la casona fue residencia del profesor bautista. En el terreno fue construida la casa que ocuparía quien fue el presidente del Seminario desde su fundación y hasta 1943, el misionero presbiteriano James McCallister. Fue costeada por el sínodo de Nueva York. Hoy todavía es conocida como la Casa #1. La primera de las casas de los profesores en ser construida fue la del profesor metodista en 1931. Para 1936 otras tres casas adicionales para profesores ya estaban construidas. Los profesores eran misioneros y todos sus gastos, incluyendo sus sueldos, eran costeados por sus misiones. La foto parece indicar que el tipo de construcción varió. En 1935 la junta que dirigía la corporación del Seminario compró el terreno con su casona. Esta junta –Board of Trustees– reunía representantes de cinco sociedades misioneras denominacionales y dos asociaciones misioneras independientes. La junta se reunía regularmente en Nueva York. Existía una junta local, en la que participaban puertorriqueños, llamada Board of Managers, que se encargaba, entre otras funciones, del mantenimiento de las instalaciones. Al terreno original de la casona le fueron añadidas otras cuatro parcelas. Entre todas sumaban 5 cuerdas. La ubicación de la propiedad se conocía por el número de la parada de los autobuses, la Parada 38 ½, de la avenida que en 1913 fue bautizada Juan Ponce de León. El ensanchamiento de esa vía le costaría al Seminario la primera expropiación de una faja de terreno en el lado este. Posteriormente, habría otras dos expropiaciones, en el lado oeste y el lado norte. En 1935 todas las operaciones del Seminario fueron mudadas al campus que al día de hoy conserva. Tener todas las actividades en el mismo campus fue considerado ventajoso por profesores y estudiantes. Con algunos arreglos que se le hicieron a la casona, acomodaba los estudiantes, los salones de clase, la oficina del presidente, la capilla, el comedor, la biblioteca y los servicios sanitarios. El edificio que antes había ocupado el Seminario fue adquirido por la Universidad de Puerto Rico y demolido años después. En 1937 el Seminario gestionó el servicio de acueducto y alcantarillado. Hasta entonces se usaban aljibes. Benefició a las comunidades pobres que le rodeaban. Los niños de esas comunidades que iban a jugar a los terrenos fueron organizados en una tropa de Niños Escuchas. La iniciativa partió del primer profesor puertorriqueño del Seminario, Florencio Sáez, padre de algunos integrantes de los juegos. Luego de construidas las casas de los profesores, la siguiente construcción fue un dormitorio de estudiantes al lado de la casona, alrededor de 1940. Ese dormitorio formó parte de la futura biblioteca, de su sala de lectura y oficinas. El edificio sustituto de la casona se planificó por algunos años. Finalmente fue construido en 1957 e inaugurado en enero del 1958. El crecimiento económico extraordinario de la década del `50, el de los años posguerra –en los Estados Unidos, Puerto Rico y en todo el mundo–, hizo posible una construcción masiva bajo la presidencia de Thomas Liggett (1957-1965). Los misioneros americanos tuvieron la inmensa ventaja de lograr grandes donaciones de sus juntas misioneras y de congregaciones. Aparte de la adquisición de dos casas localizadas en terrenos del Seminario en la calle Orocovis (1958) y de la construcción del edificio administrativo y académico, fueron construidos: nuevas casas con segundos pisos, un dormitorio con acomodo de 66 estudiantes varones recomendados por sus congregaciones (1962) y la biblioteca (1965). El Seminario no volvió a construir otra obra de envergadura hasta fines de siglo, cuando fue remodelado y ampliado el edificio administrativo y académico de 1957. (fb)

Relanzamiento del Certificado Básico en Misión e Interculturalidad Programa de Educación Continua-Seminario Evangélico de Puerto Rico ¿Tu llamado es a servir a través de las misiones? ¿Deseas renovar la mirada y el quehacer misionero mediante el estudio bíblico teológico, la percepción intercultural de la realidad, y el análisis de los retos éticos-sociales del contexto local e internacional de la misión? ¡ESTE CERTIFICADO ES PARA TÍ! Comenzamos el 27 de septiembre de 2025. Fecha límite para inscripción: Jueves, 18 de septiembre de 2025. Consta de 5 cursos (presencial y conexión sincrónica por ZOOM) y participación de un proyecto misionero local o internacional. Costo: $350 Certificado completo Para inscripción 👉 https://sepr.populiweb.com/router/admissions/onlineapplications/index?application_form=38559 Para más detalles: Email: registro@se-pr.edu Teléfono: 787-758-4141 ext. 251 Horario de oficina: Lunes a Jueves 8:00am a 6:00pm Viernes las oficinas están cerradas. (fb)